Afortunadamente,
solo las personas vivimos en casas,
porque si
los animales también tuvieran casas y no madrigueras o nidos,
y los
insectos tuvieran también casas y no huecos milimétricos o instantes,
y los
árboles también tuvieran casas y no exactos contornos,
no habría
sitio en el mundo para nadar ni para el agua
y habría que
incluso sacar a los peces del mar y de los ríos
y meterlos
en las casas para que no se mueran sin agua
y regarlos,
y regarlos, y regar a los peces para que no se mueran.
De Zaquizamí
Jajaja Qué absurdos somos, verdad?
ResponderEliminarY podríamos serlo más, sólo que nos contenemos (en peceras).
ResponderEliminarUn abrazo, Nuria.
Tienes toda la razón, nos contenemos a no ser mas absurdos en ese aspecto
ResponderEliminarSaludos
Y en muchos otros. Lo absurdo no se puede subestimar nunca.
ResponderEliminarSaludos, Felipe.