Sí.
Ya sé que podría haberlo hecho mejor. Siempre se puede
hacer mejor. Debería hacer caso a los muertos y conjugar Siempre como un
verbo, Hacer como un epíteto, y Podría como un tachón. Tacha, tacha.
Tacha esa palabra con el hacha. Labra la cabra. Pasa una cebra en racha. Cucha
qué cucaracha. No la mates. No tiene mérito hacerlo. Mata a alguien influyente
y poderoso. Mata al Papa. Mata al Presidente. Mata el tiempo. Suicidarte
tampoco es un arte. Es una baja en el censo. Es una esquela en el periódico. Es
un placer. El placer es mutuo. ¿Cómo dijiste que te llamabas? Ava cría malvas
en una casa de algas. Sus vecinos vienen todos los días a verla a la hora de
comer: Gusanito tenedor, Gusanita cuchara, y sus hijitos los Gusanitos
cuchillos, que aún no saben diferenciar el mimo del sadismo. Es lo mismo. Todo
es lo mismo. Siempre se puede hacer mejor. A lo mejor no lo entiendes. Hoy es
viernes. Mañana no.
No.
Como todos los días, esta mañana, temprano, he salido a caminar. Ya de vuelta, frente al Guggenheim, bajo el puente de la Salve he visto varios coches de policía. Al acercarme he visto el cuerpo de una persona tapado con una manta, con abundante sangre en el suelo. “Se ha tirado desde el puente”, ha dicho uno. He vuelto a casa impresionado, pensando, no es el primero que se ha tirado de ese punto. Otro suicidio. Terrible.
ResponderEliminarLo siento mucho, Pedro. El suicidio nunca debería ser una opción.
EliminarAbrazo.
Elena, ojalá todas las cosas terribles pudieran expresarse con este sentido del humor tan profundo, tan tragicómico, tan inteligente. Sí, y no, y siempre.
ResponderEliminarUn abrazo.
No te digo yo quién tiene el arte... TÚ. Todito, entero :)
ResponderEliminarAbrazos, Auralaria y Nuria. Ojalá tuviéramos una sonrisa para todo, pero no es posible. Hoy tengo una, tamaño mediano, a compartir entre tres. ¡Va en camino, juro que no muerde! :)
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