La nueva
actuación,
tras su
sonado éxito en los estudios,
ha llegado a
la calle
y derrotado
a las actitudes
que ha
encontrado a su paso.
En cualquier
parte se pueden ver
representantes
de la nueva actuación:
madres
arrancándoles la cabeza a sus hijos,
jefes
besando a sus empleados,
religiosas
haciendo la esquina.
En paralelo,
hay contrabando de realidades
que nadie
quiere,
porque son
más baratas
pero se
rompen enseguida.
Bueno, si la crisis aprieta, habrá que conformarse con las realidades... Veremos mañana que piensan al respecto mi madre, mi jefe y las monjas del convento (de la esquina).
ResponderEliminarSalud-os
jejeje, hola, Amando!!!
EliminarLa vida cambia y las realidades también. Ahora somos reales de plástico barato, en muchas cosas y nos falta la rudeza de la plata de antaño, que se acomodaba a nuestro lado.
ResponderEliminarTodo existe a la vez en un raro maremagnum, pero es lo que tenemos ahora y habrá que vivirlo.
Un abrazo...Guaci.
Cierto, Guaci. Las monedas de antes, con más peso y presencia, daban también más firmeza. Ahora aplican la ley contraria para los billetes, que apenas pesan y son los que de verdad mueven (desgraciadamente) el mundo.
ResponderEliminarTodo está al revés.
.oseb nU