Al principio no me sentía con ánimos para continuar el blog. Después sí, pero me daba pereza retomarlo. Hice algunos cambios, puse unas tizas por ahí, pero no terminaba de motivarme. Por otro lado, está el asunto Blogger: desde hace un año o así, no me deja acceder con normalidad, sino que tengo que entrar a través de mi perfil, y después entrar por el icono de Blogger. Pensé en llevarme el blog a Wordpress, pero no me convence del todo. Llegó julio y me dije... ¿y ahora voy a retomarlo, si en verano no hay ni un alma por ningún sitio de interior (los blogs lo son)? Pues sí. O al menos me lo estoy proponiendo. No como algo que me exija la dedicación que no puedo darle, pero sí como ese balcón al que necesito asomarme a veces, y ver en verde. Se trata de respirar, más o menos lo de siempre.
¿Cómo que no hay un alma por ningún sitio? ¿Y qué si no la hubiera? Escribimos para nosotros mismos, aunque nos gusten los testigos y compartir con los demás. Ánimo.
ResponderEliminarTambién comparto que no me gusta Wordpress y que Blogger está teniendo muchas historias que incordian, pero ellos son los dueños, ya sabes.
Hay que seguir, estar y prospectar. Ánimo, Elena.
A mí me gusta verte por aquí, y que Fackel te haga comentarios. Venga, nos vemos en estas playas de secano. Besos
ResponderEliminarme encanta la foto que acompaña a "ese balcón al que necesito asomarme a veces..."
ResponderEliminarque haya mucho verde por respirar! cariños,
No dejes de asomarte a tu espacio, yo también vendré.
ResponderEliminarBesos y adelante.
Tienes razón, Fackel, lo que pasa es que he estado un tiempo con cavilaciones y dudas y pegas y.... y hasta aquí, que pienso continuar con esto pese a todo, porque es más personal que otra cosa. Muchas gracias por los ánimos, para mí son muy importantes tus palabras (éstas y las que leo en tu blog: todas).
ResponderEliminarCasilda, Mónica, Auroratris... os digo igual: gracias.
Y abrazos.