jueves, 1 de octubre de 2015

El grifo




Silabeando
segundos terminados en   u
dice que no hay siesta… y no hay siesta.

Oírlo
no me da sed:
me da hidrofobia.

Pero no me voy a levantar,
pues la pereza
es mi llave de paso

de tres y media a cinco,
y yo tampoco estoy
bien cerrada a esas horas.

De Esta dichosa ansiedad doméstica

3 comentarios:

  1. Genial!!! me gusta mucho Elena! Hay grifos que estarían mucho mejor con la boca cerrada, pero...
    (Yo también le hice un poema hace tiempo a un grifo de esos que no callan...aquella temporada lo tenía en casa así, supongo que fue todo un homenaje jaja)
    Saludos!
    Sandra.

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  2. Hay grifos que quieren permanecer en la memoria, y entonces los poemas :)
    Saludos, Sandra!

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