Eso de los
test de personalidad
a rellenar
en habitaciones blancas
junto a
personas de color carne meditabunda
para
definir psicologías de cara a puestos de trabajo
que
reclaman actitudes mecánicas,
eso a mí
me inquieta.
Mi
personalidad es, al apagar las luces
y, pasados
los primeros segundos oscuros,
una
definición de lo cercano,
borrosa
pero creíble.
Yo aún me
pregunto
no por qué
duermen tanto los bebés
sino con
qué sueñan.
Ovillada,
escondo el hilo
por el que
se llega a mi perfil
de
espaldas.
De I.M.I.
Tenemos mucho más matices, como digo yo...y eso test en los que creen conocer nuestra personalidad, no son muy creíbles del todo y más si son, por ejemplo, para una oposición o examen para encontrar trabajo... y más si has hecho unos cuantos y sabes qué es lo que buscan.
ResponderEliminarBesos.
Sublime. Querida, tienes un don.
ResponderEliminarUn abrazo blanco.
María José, coincido contigo. Son absurdos y delimitadores, y en cuanto has hecho unos pocos ya sabes lo que piden y lo que tienes que dar. Y sin embargo, ése es el rasero... Un abrazo sin encasillar.
ResponderEliminarNuria, he tendido tu abrazo blanco y cuando he ido a recogerlo me ha llenado las manos de colores.
¡Pero qué cosas más bonitas me dices! Añado un beso y subo otra sonrisa.
EliminarTiendo la sonrisa y tiendo el beso. Ya viene el sol :)
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