Tu pasaje, bloque uno:
ventanas abiertas de par en par para aves calcáreas
y ventanas con rejas para corredores de bolsa
demasiado adictos al suicidio.
Si me ves por ahí, no me des limosna,
aunque te figures que la necesito.
Tu pasaje es un criadero de contrastes,
sólo eso, no lo olvides.
Parezco seria porque no sé reír.
Parezco insomne porque no sé dormir.
Tú abres las ventanas de par en par
y lo cambias todo de sitio.